Durante la tarde de ayer, nuestro barrio se llenó de Bienaventuranzas con el tradicional Rosario Vespertino en el que Nuestra Madre acudió a las puertas del Hospital para que con nuestro rezo María recoja bajo su manto a enfermos, recién nacidos y profesionales de la Salud.
Culminando con la eucaristía en la que celebramos la Solemnidad de Cristo Rey.